No, no voy a retroceder, debo seguir adelante, todo forma parte de mi vida, de mi. Soy el conjunto de mis experiencias y sigo buscando mis alegrías que forman parte de mi felicidad; la música me mueve y yo decido el ritmo que quiero seguir.
La boda de unas amigas, hace unos meses, me hizo descubrir cuanto puede hacer el baile por mi, pasar de estar desorientada a estar segura, volver a sonreir, disfrutar de muchos momentos, conocer la parte mas guasona y tímida de la gente que estaba allí. Reir, saltar, pedir una sonrisa para una foto... Fui feliz.
El baile me emociona, me relaja, me inunda de creatividad.... Uy.. ¿que hora es? ...hora de bailar.
Eh aquí ritmo, elegancia y sensualidad: Sara Baras.